Quiero compartir con todos Uds. mis reflexiones que fueron la despedida para el menor de mi clan, al finalizar el ciclo secundario.
Lo comparto porque me encontré con alguien que como ellos compartió mucho de ese recorrido y aún hoy lucha por sacarse en enorme sombrero que años de estigma negativo le generó.
No dejemos que nuestros hijos, ni ningún niño o adolescente crea el mensaje de que NO sirven, NO pueden, NO son lo suficientemente buenos.
Hoy volví a sentir la misma impotencia con la que a diario debo lidiar frente al sufrimiento de muchos en su camino por las aulas.
Gracias a nuestras voces, espero algún día este sistema educativo cambie.
Ceremonia de Graduación.
Fin de un ciclo.
2 de Diciembre 2017
Este momento está y estará inscripto en mi vida en forma indeleble.
Billy, es el menor de mis cinco hijos y hoy egresa y nuestra familia lo hace con él, aunque mi corazón se quedará aquí por siempre.
Fueron 23 años de nuestra vida, mas de mil millones de momentos compartidos en estos patios. Lágrimas y risas.
Un combo super completo.
Estas deben ser de las palabras mas difíciles que me han tocado decir.
Mas difícil que disertar en el Senado de la Nación el martes pasado.
Decidí sentarme varias tardes a registrar en mi memoria estos años para escribir,
pero no aparecía nada.
Decidí abrir la conexión a mi alma, sentir conscientemente y allí no hubo obstáculos para hacerlo.
Estar presente en la vida, es la manera de vivir que elegí hace tiempo.
Quiero hablarles desde ese lugar esta tarde.
A Uds. y a quienes les acompañaron todos sus años de escuela.
Siento como madre, un enorme orgullo de haber podido acompañarlos, y haber respetado la
esencia que cada uno de mis hijos fue moldeando en el transcurso de ese camino.
Todos pasaron por estas aulas, tres lo hicieron desde jardín hasta graduarse.
Son muchas millas de un colegio inglés para una familia con varios DESATENTOS E HIPERACTIVOS..
mucho esfuerzo si tenemos en cuenta que no podían pisar el césped.
Hoy los miro a todos, y veo en Uds. la vida misma.
Creo que corresponde hacer un balance.
No me refiero exactamente a mirar el gasto enorme que implican 23 años de cuotas escolares
muy muy interesantes...
Me refiero a la inversión que significó elegir este espacio para nuestros hijos.
Eso fue lo que hicimos, una INVERSIÓN a largo plazo.
Cada uno se llevó algo diferente.
En mi caso cinco historias fueron marcadas tras el paso por este colegio, junto a la mía.
Los maestros, los profesores deben saber la enorme influencia que generan en las vidas de cada
alumno.
Mis hijos, tuvieron grandes maestros.
Para ellos va en particular mi enorme gratitud y reconocimiento.
Hubieron quienes les ayudaron a ver, aquello que no deseaban ser o hacer cuando fueran grandes,
otros despertaron sus talentos, ayudándoles a creer en sí mismos.
Pero todos, todos, fueron muy importantes como modelos.
El contenido académico es para mí lo menos trascendente, eso se busca en los libros.
Fueron las formas, los estilos, la capacidad que tuvieron para despertar o anular su motivación lo que
quedó registrada en ellos.
En el proceso de desarrollo de niños y jóvenes, ser conscientes de cómo podemos condicionar
sus destinos, es una realidad que algunos no tienen presente.
Es para mí la interacción humana y la mirada de quien los acompañe lo que no viene en un tutorial,
ni en un texto. La mirada, las palabras, la confianza que traslademos a un niño, serán las que luego
crecerán en su interior.
En mi balance quisiera compartirles porque creo que este es la parte mas importante de todo
el tiempo del colegio.
Entre el laboratorio de biología y química de la mano de Mrs Primrose fue la fascinación en los
experimentos, lo que ayudó a Juli a definir por la Medicina, mucho mas que mi profesión de médica.
Apostó a la UBA muy segura de que podría.
Ahora trabaja en el Westchester Hospital, algo lejos para sumarse al Choral, pero lleva inscripto en su
corazón ese espacio, sigue cantando.
Andrés, con Mariella Blanco y Verónica Mandiá, en el escenario, reencontró a su verdadero ser en el
teatro y en la música. Ahora escribiendo y dirigiendo sus propias obras recibe el reconocimiento que le
faltó en las clases.
Trabaja duro para sostener sus ideales, pero es tan perseverante como su abuelo.
El Teatro ayudó a unir los pedazos que se fueron rompiendo acá mismo, cada día de clases.
Encontró y se llevó lo que amaba pero también pudo dejar lo que no quería.
Lo admiro mucho por ello.
Hoy trabajo para que niños y adolescentes con TDAH vayan al colegio creyendo que podrán
aprender y hacer amigos. Muchos maestros y profesores aún ignoran cómo manejar sus diferencias,
y les ayudan a convencerse de que no pueden.
Sin tener ningún problema en su capacidad intelectual muchos salen de las aulas, con la completa
certeza de lo contrario.
Es mi compromiso y mi motivación creer en un cambio, y crearlo mientras siga viva.
Larita, mantiene un gran grupo con sus mejores amigas, aunque varias están desparramadas por
el mundo, hoy disfruta su violoncello, que volvió a sacar del estuche. Amó la orquesta con Roberto
pero mas sus clases de arte, el amor por el diseño y su talento la llevaron muy relajadamente a
egresar como arquitecta en la UBA. La profesora Laura Cicero ayudó bastante al menos le hizo s
entir que matemáticas no era una barrera.
En el caso de Luli, (mas contemporánea a todos Uds) todo el departamento de música,
Diego, Maxi, Roberto, le ayudaron a descubrir su voz, su talento en la flauta, y a mejorar su autoestima.
El departamento de música la ayudó a lograr la armonía que necesitaba.
Llegó a ser Music Captain muy merecidamente, hace 3 años.
Fue de la mano del Profesor Balza y de Mariana Sartoris que encontró donde era realmente el lugar
para hacer escuchar su voz.
Fue cuando sintió que podía, cuando confió en ella.
Hoy estudiante de Relaciones Internacionales, sigue cantando y tocando su flauta, porque aprendió
a sentirse feliz al hacerlo, pero sueña con ser parte de las Naciones Unidas.
Billy nos dió tantas sorpresas que no nos dio tiempo de procesarlas, siempre fue el de perfil mas bajo,
siempre.
Se convirtió en el moño para cerrar este ciclo enorgulleciendo a todos como House Captain, y como
gran persona. Tranquilo fue resolviendo todos sus problemas, consolidando su temple.
Su cambio, empezó con el deporte náutico del padre, siguió con su compromiso por la música de la
mano de Beto, su gran maestro, ahorró para su batería, y las clases en su propio sótano le ayudaron
a sentirse seguro, capaz de conseguir sus objetivos.
Fue después en una de las clases de física de la mano de Federico, que definió su camino, sumado a tener que dar matemáticas...la única materia que se llevó a Diciembre.
Ambas situaciones consolidaron su deseo de ser Ingeniero.
Un ejemplo de cómo encontrar una oportunidad en una crisis.
Una sorpresa y una emotiva conexión con la historia.
El primer Ingeniero en la familia, mi abuelo egresó en la UBA en 1914.
Perdón pero cinco hijos hoy ya todos ex alumnos, merecían un espacio.
Mi absoluta reverencia hacia lo mejor que tiene para mí este colegio, su departamento de música.
Su gente, su pedagogía y el espacio con mejor criterio y donde los chicos desean ir, sin que nadie
les obligue. Todos brillan, todos sonríen y todos se divierten. Los resultados están a la vista, logran
excelencia proponiendoles amar lo que hacen.
Tendría que volver a existir el departamento de drama, porque ambos tienen en el aprendizaje y
en el desarrollo integral de un niño, el mas trascendente de los lugares.
Gracias a Uds. mis hijos son muy felices.
Me alegra estar hoy hablándoles acá y no en la ceremonia del miércoles,
entrega de medallas, libros, honores.
No soy afecta a los premios, como tampoco lo soy a los castigos.
Creo que cada situación debe ser seguida por una consecuencia natural.
Y de ello, surge el verdadero aprendizaje, no de una recompensa.
Creo que las reglas rígidas sirven solo para generar obediencia, y no ayudan a desarrollar
una posición madura, por ello la educación de mis hijos fue muy libre, tanto como para no condicionar
sus elecciones.
Muchas veces sentí no encajar muy fácil en este entorno, tenemos todos una mirada
mucho mas abierta, pero agradezco el habernos quedado, porque sumamos muchas cosas
buenas en este tiempo.
El pasaje por el colegio nos veces deja mensajes condicionantes a todos.
Me gustaría que Uds. hoy se animen a dudar de ellos.
Quien tuvo muy buen promedio, cree tener todo claro, pero no está listo para fallar en la Universidad.
Desarrollaron una confianza adherida a una nota, confianza que no creció de adentro, que no está
lista para un 4.
No se desanimen, solo es cuestión de aprendizaje.
Más si eligen la Universidad Pública, donde no hay clemencia ni clientelismo.
Me preocupan los que crean que por no haber tenido premios, o notas altas no pueden apostar a
algo grande.
Esos que se fueron quedando coleccionando materias, los que arañando aprobaron,
los tímidos cuyas voces quedaron calladas, pero son pequeños diamantes en bruto.
Los jóvenes no fracasan solos, rara vez se cuestiona quién les enseña.
A veces medimos y calificamos resultados que sesgan.
El éxito no es lineal.
Animense a llegar todo lo lejos que quieran, ninguna nota debe ser una barrera, ni un certificado
de capacidad tampoco.
En ambos extremos se pierde.
Los invito a despojarse hoy de todo estigma.
Ni Steve Jobs hizo una carrera Universitaria, Ni Frank Lloyd Wright fue arquitecto.
Hay muchos universitarios detrás de un escritorio llenando planillas, y con un título dentro
del placard y eso, en la vida cotidiana es algo que me lleva a pensar en cómo seguimos educando.
Todos Uds. pueden.
Todos.