ADULTOS SIN MANUAL DE INSTRUCCIONES

Si sos un adulto con dificultades en tu organizacion, pero no por exceso de tareas sino por que sos capaz de hacer complejo lo mas sencillo, tal vez puedas encontrar algunas cosas utiles aqui.
Si sientes que un motor esta encendido sin poder silenciarlo, o que tu motivación se escurre y te aburres demasiado pronto... Si haces mil cosas pero pocas terminas...

Si las listas de tareas incompletas te superan, si quisieras tener un mes más en el año porque jamás llegas a tiempo, tal vez aqui te encuentres.
Si olvidas tus llaves, tus telefonos, tus compromisos, lo que te han dicho o ibas a decir....la cara del mozo, el nombre de la mujer de tu socio....estas en el horno si sos un adulto. Pero puede que tengas TDAH.
Si te sientes irresponsable, avergonzado, humillado y por sobre todo desconcertado porque por momentos tu funcionamiento parece exactamente igual que el del resto....
Tal vez aqui encuentres una pista. Si recuerdas el link...
Aquí estoy para a ayudarte a que lo recuerdes. Te espero en este espacio, para que entres, leas, comentes, compartas con otros y siempre regreses por mas!
Nos vemos
Norma Echavarria
Médica Psiquiatra

martes, 12 de julio de 2011

Sin garantia ni devoluciones

Todos estamos destinados a morir. Tarde o temprano.
No no estoy apocalíptica, aunque escriba desde la habitación de un sanatorio.

Desde que nacemos, todo el trayecto hasta ese momento final, es eso que llamamos vida.
Todos tenemos un cuerpo, que debemos cuidar porque es el único que tendremos.
No viene con garantías. Es irremplazable y está a nuestro cargo.

Aun no se han inventado transplantes de cuerpo entero, aunque muchas mujeres por la vida lo están intentando en forma fraccionada.

En el mundo adulto, ya no tendremos quien nos lleve al pediatra, pida turnos al dentista, ni se encargue de prestar atención por nosotros al cambio de color de nuestro semblante.
En la vida adulta, deberemos ser no solo responsables del motor sino de la carrocería.
Y esto es una de las tareas que ya anteriormente denominase "tarea de mantenimiento"
Un aburrido capítulo cuando el cuerpo no da señales de mal funcionamiento y aún complicado cuando empieza a hacerlo.
Digamos que en idioma médico, a esas señales llamaremos síntomas y signos. Y están avisando que algo del lado de adentro requiere entrada en boxes.

Igual que un auto.

Si hace un ruidito, los mas precavidos lo llevarán al mecánico, los otros, salvo que les impida la circulación seguirán sordos. Pronto parte del ruido de fondo al que elegirán acostumbrarse. Mas aún si quien registra la falla (con suerte), tiene TDAH.

Porque para ese sujeto será mas tolerable el ruido, que la intolerable tarea de pedir un turno al mecánico, quedarse unos días sin auto, o peor aún tener que pagar por el reemplazo de repuestos usando el dinero que siempre está mejor gastado al obtener algo placentero a cambio.

Lo mismo sucede con el cuidado de nuestra salud. Del que corremos riesgo de distracción permanente.

Estoy seguro de haberlo visto, se que lo puse en algún lado.

Estoy seguro de haberlo visto, se que lo puse en algún lado.

Estoy seguro de haberlo visto, se que lo puse en algún lado.

Y hablando de casas donde el desorden forma parte de la escenografia cotidiana, no se escapa a semejante caos el sector papeles y documentos.
Pues bien hemos dicho antes, hablando de los hogares y el TDAH, todo se inicia cuando dos personas que se aman deciden irse a compartir la vida juntos.
No hablaremos en este capitulo de la convivencia que no tenga como eje el conformar una familia, pero valdrán muchos de los ejemplos para ellas también, les aseguro.
Uno de los dos cohabitantes, llegará con la vida en un sobre, o en una carpeta. ( Si no tiene TDAH, seguramente)
Prolijamente ordenados, los papeles que año tras año juntamos por el solo hecho de seguir viviendo.
Certificado de Nacimiento.
Certificado de vacunación.
Certificado de bautismo. ( para los que somos catolicos, el resto no se que papeles tendra..)
Una suerte de lista de datos importantes, entre los cuales conviven, grupo de sangre y factor, datos que nuestros padres, (teóricamente) fueron coleccionando como testimonio de nuestro crecimiento.
Algunos boletines o informes del colegio.
Documentos de identidad, aqui en Argentina DNI y cedula del mercosur. Pasaportes, y visas.
Carnet del club, certificados que acreditan años de colegio cursados, o examenes aprobados de Cambridge, de la Goethe, o de la Dante, con acreditacion del conocimiento de algún idioma... papeles de conservatorio de música, papeles, papeles y mas papeles.
Se agregaran en la vida adulta, carnet de conductor, papeles de automoviles, carnet de medicina prepaga o seguros de salud y cuando vivimos en un piso, o una casa, se agregan mas boletas de luz, gas, telefonos varios, internet, impuestos inmobiliarios, expensas, resumenes de tarjetas de credito, facturas de todo lo que adquirimos y pasamos a gerenciar como adultos.
Si tenemos mascotas, un certificado de vacunación mínimamente.

Imaginan que un sujeto adediano, con deseos de independencia, salga rumbo a la convivencia con semejante carga heredada sin saber que hay en la caja?
(si con suerte tuvo una madre o un padre que al menos ubico semejante curriculum vitae de papeles en un solo sitio)
Bueno, con suerte quien lo acompañe, será el o la encargada del titulo de posesión o del antiguo cargo de tenedor de libros.
Para un sujeto con TDAH no suele ser difícil guardar documentación solamente sino discriminar que es lo que debe guardarse y que no. Por ello en la hipotética circunstancia que tenga una "caja", estarán en ella las figuritas repetidas de su primer  álbum, mas los programas de las obras de teatro, mas boletos de tren, mezclados con la partida de nacimiento y el pasaporte.


sábado, 2 de julio de 2011

Mas que tornillos flojos

Mantenimiento.


Una palabra aburridisima para sujetos con TDAH.
Todos los principios pueden ser divertidos, cuando no lo son es porque la tarea en cuestion esta fuera de nuestro ambito de intereses.
Todos queremos quedarnos haciendo cosas divertidas, y evitando o pateando para adelante cosas aburridas, o complejas.

Pero ambas las que nos encantan o las otras pasarán de moda para nuestra motivación demasiado rápido.


Todo se olvida, todo se pone gris o insípido, los cachorros crecen, solo porque dejo de ser novedad o porque ya es parte de algo realizado. Un deseo cumplido, raramente se mantiene vivo.

No quedarse a disfrutar, puede ser disparador de una crónica insatisfaccion para el que lo padezca, pero todo, todo lo que adquirimos, a no ser que lo comamos, deberá ser mantenido en el tiempo.


Un claro ejemplo el de un cachorro de cualquier mascota.
Excitación familiar y entusiasmo, y así surje la compra del pobre animalito que después de ser el centro de atención de todo el grupo familiar, en un mes con mucha suerte pasará a ser historia.
Alguien piensa acaso al traerlo a casa, que hay que bañarlos, alimentarlos, llevarlos al veterinario, jugar con ellos, enseñarles a hacer sus necesidades afuera, a tener buena conducta, etc, etc?
Si con suerte una familia adediana, logra que los chicos aprendan a bañarse por iniciativa propia,o a tapar el frasco de las galletitas, o a juntar sus juguetes....como es que va a educar una mascota?

jueves, 30 de junio de 2011

Nuestras cosas

Una casa, inicialmente suele estar vacía.
Se mudan los tórtolos, novios, o recién casados, y de allí en adelante armaran el hogar donde empollaran su cría, en caso que eso sea posible.
Una casa adediana, eso incluye departamentos, o pisos como les llaman en España, se irá llenando de cosas muchas veces sin seguir ningún criterio. Ni decorativo, ni útil.
Probablemente lo mas adecuado sería mencionar que el criterio, es la ausencia del mismo.
Muebles heredados, comprados, regalo de bodas, serán ingresados al espacio sin demasiado cuidado.
Todo sitio tiene un límite. Paredes, ventanas, techos ofrecen superficies que obviamente delimitan un espacio finito.
Eso no significa delgado. Implica que termina. Una pared de tres metros, tiene exactamente eso, tres metros.
Pero un buen ejemplo es el de comprar un sillón enorme, porque en el salón donde lo exhiben parece increíblemente atractivo. Pero luego, o no subirá por las escaleras, o no atravesará la puerta, o simplemente interrumpirá el paso, porque nadie, absolutamente nadie, pensó en donde iban a ubicarlo, antes de firmar o cerrar el trato.
Falta de planificación, impulsividad, el ya mismo, el entusiasmo desmedido, la dificultad frente a la espera, y el rechazo a todo aquello que implique varios pasos son parte de las razones de tener una escenografía bizarra.
No solo eso, sino carísima.