Irónica Libertad

Irónica Libertad

Pensaba en la imagen que muchas personas con TDAH pueden dar al resto del mundo.

Una frescura de libertad y cambio constante.

El hacer viajes, o cambiar de trabajos, las múltiples mudanzas, los diferentes países ciudades, muchas y diferentes actividades  inconexas, algunas divertidas o inusuales, cautivadoras de la atención de quien observa con desconcierto.

Incursiones en diferentes áreas de estudio, del arte,o los idiomas, las manualidades, los oficios, los deportes,o la participación en prácticas religiosas, o actividades políticas con gran compromiso que de repente caen en el ateismo o el desinterés cívico.

Tal vez porque no, ser adultos y no trabajar, y dependiendo de algún otro que lo 
haga.

Flotar en la adolescencia eternizada, la dolce vita, carente de la responsabilidad cotidiana del adulto.

A veces el emitir opiniones, hacer planteos frontales, asociarse, y romper sociedades. 

Casarse, divorciarse, volverse a casar, tener hijos.

Hacerse de muchos amigos, y luego dejarlos de ver, de llamar, e iniciar nuevas relaciones.

Comprar casas, autos, alquilar negocios o viviendas, invertir dinero en proyectos, iniciar emprendimientos en diferentes áreas, y muchas mas muestras de acciones de cambios.

Para los muchos que disponen de un tiempo 
para tomar decisiones, para los que pueden evaluar y detenerse a elegir, éstos movimientos, parecerían surgidos del seno de seres envidiablemente libres.

Y pensaba, cuanta ironía, no?

Presos de impulsos, de cambios de humor, de baja tolerancia a la frustración o a la inversa víctimas del entusiasmo súbito que nos atrapa, cambiamos de rumbo sin pensarlo.

Por eso, puede que estas conductas se parezcan a las de seres con enorme libertad, pero realmente son producto de vivir atrapados por la desmotivación, o el apasionamiento , por el enamoramiento sorpresivo, o la desilusión repentina.

Tanto cambio interno es responsable de tanto giros inesperados, bruscos, impensados para los que nos acompañan, y por que no para nosotros mismos.

Somos libres de elegir, cuando no podemos realmente atravesar concientemente el proceso de la evaluación necesaria para realizar un cambio?

Somos libres cuando vivimos atrapados por el aluvión emocional que decide por nosotros?

Somos libres cuando nos faltan registros, que otros aseguran que tenemos, pero están temporariamente inaccesibles por falta de ellos y al estar ausentes nos faltan  la comparación y las experiencias anteriores a la hora de elegir la mejor de las opciones?

Somos libres si vivimos permanentemente condicionados por el temor a la opinión ajena, sobre todo cuando es una potencial crítica?

Somos libres si no sabemos pedir ayuda, o pedir un consejo, por temor a sentirnos aún mas vulnerables e inseguros?

Somos libres si dependemos de alguien económicamente, porque no nos creemos capaces de valernos por nosotros mismos, y aceptamos su destrato o sus límites impuestos como peaje diario casa y comida?

Personalmente la acción diversificada me marea. 

Y aunque sigo dando una imagen de enorme actividad, la gran diferencia reside en que son  hoy intencionalmente diseñadas. 

O sea, acompañadas de enorme calma y disfrute interno.

Porque lo que me marea es mudarme de una tarea a otra, cuando estoy instalada en una.

Ahora disfruto de las tardes ocupadas en una sola actividad.

Y aunque me costó reconocerlo, es enormemente mas eficiente y mas productiva mi acción de esta forma, y obvio mas conciente.

Allí radica para mí la diferencia entre ambas acciones, en el registro del disfrute del proceso, en la conciencia del progreso y de la aparición de resultados.

Aún cuando deba repetir la secuencia por algún error, o por falta de tiempo o experiencia, no desaparece la motivación ni aparece la desilusión a desviarme el camino.
Todo porque puedo esperar sin desesperarme, algo que no hubiera podido de no ser por el tratamiento.

Disfruto de planificar un proyecto, de los preparativos, del tiempo de espera hasta que los recursos necesarios aparezcan o pueda reunirlos. 

Sea tiempo, dinero, o alguien con quien hacerlo posible.

Porque si deseamos hacer algo con alguien, muchas veces debemos coordinar los tiempos y las posibilidades de ambos, y tener paciencia y tolerancia a las esperas.

Cosa difícil en alguien con Deficit de Atención sin tratamiento.

Cuando vivimos en el aluvión de los impulsos, o de la distracción inevitable, la pérdida del rumbo previo y la adquisición de uno nuevo, nada tienen de elección. 

Por eso la imagen de cambio carece de LIBERTAD en su esencia, mas bien es la dependencia a impulsos que dirigen, sobre todo las emociones condicionantes sin posibilidad de espera.

Si vos queres sentirte realmente libre, y tenes TDAH, buscá ayuda. 

Porque la verdadera libertad llega cuando puedas conectarte contigo conscientemente. 

Y eso no se logra charlando solamente, me refiero a una terapia, o un coaching. Necesitas estar medicado, si tu diagnóstico es ese. Muchas personas se sienten identificadas con características pero no todo es TDAH, cuidado.

El Deficit de Atención es un problema del neurodesarrollo, demasiado frecuente en adultos, para lo poco que está tratado. Y con una respuesta enorme al tratamiento farmacológico. Debe de ser diagnosticado por profesionales capacitados y con familiaridad al trastorno, y médico psiquiatra o neurólogo preferentemente.
No hay estudios especificos para determinarlo, ningun metodo te da certeza, por ello, busca alguien con mucha experiencia en el tema.

Tal vez tengas que ponerte las pilas para un proyecto que vale realmente la pena.

Tú.

Siempre dije que de tener que elegir una palabra que honro, sería LIBERTAD. 

Por eso elegí escribirles hoy.

Con LIBERTAD el resto es posible, en su ausencia la vida es superficial supervivencia.

Desde la LIBERTAD amo, creo, elijo, recuerdo, pienso, decido, trabajo, cuido, y me transformo en el ser responsable que quiero ser.

Piénsalo. 

Busca ayuda vos también. Y si estás en tratamiento y no haz podido encontrar cambios, busca otro profesional. No olvides que ésta es la obra, no hay ensayos en la vida.

Norma Echavarria

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28 de julio 2013